El dengue es hoy la más
importante arbovirosis, por su gran carga de enfermedad e implicaciones
sociales. El mosquito Aedes aegypti,
su principal transmisor convive con el hombre en su hábitat doméstico y
peridoméstico.
Es una enfermedad viral, de
carácter endémico-epidémico,que tiene diversas formas de expresión clínica:
desde fiebre indiferenciada (frecuente en niños) y fiebre con cefalea, gran
malestar general, dolores osteomioarticulares, con o sin exantema, leucopenia y
algún tipo de sangrado hasta formas graves que – habiendo comenzado con lo
anterior – presenta choque hipovolémico por extravasación de plasma, con
trombocitopenia moderada o intensa y con grandes hemorragias en aparato
digestivo y otras localizaciones. También el dengue es capaz de expresarse
mediante las llamadas formas "atípicas" que son relativamente
infrecuentes y resultan de la afectación particularmente intensa de un órgano o
sistema: encefalopatía, miocardiopatía o hepatopatía por dengue.
Los cuatro virus del dengue se
transmiten en países tropicales que rodean el globo. Todos pueden causar
síndromes auto limitados o graves. El síndrome grave común (fiebre hemorrágica
del dengue / síndrome de shock del dengue (DHF / DSS)) se caracteriza por la permeabilidad
vascular repentina generada por las citosinas liberadas cuando las células T
atacan a las células infectadas por el dengue. El virus del dengue 1 prevaleció
en Hawai, donde fue transmitido por Aedes
albopictus, produciendo una epidemia clásica de suelo virgen, con
enfermedad clínica que se observa principalmente en adultos. En Cuba y
Singapur, las infecciones de dengue secuenciales a intervalos largos produjeron
una enfermedad inusualmente grave en adultos. La evidencia sugiere que los
anticuerpos neutralizantes potenciadores y de reacción cruzada regulan las
epidemias de dengue y la gravedad de la enfermedad. El DHF / DSS clásico surge
durante las infecciones iniciales de dengue en lactantes con bajas cantidades
circulantes de anticuerpos maternos contra el dengue, una observación que
impide un papel causal exclusivo para las respuestas secundarias de células T.
Aquí, reviso y analizo datos sobre diagnóstico clínico y fisiopatología de la
permeabilidad vascular y la coagulopatía, el tratamiento parenteral de DH / DSS
y nuevas pruebas de laboratorio.
La epidemia
del dengue en Nicaragua registró 7,002 casos nuevos en esta última semana, de
los cuales 447 fueron positivos. Esto refleja un rápido avance de los casos, ya
que el comportamiento por semana -hasta el 20 de julio- eran de tres mil.
Posterior a esa fecha las cifras subieron gradualmente, pasando de cinco mil a
siete mil casos.
Se expresó
este lunes 19 de agosto que los casos de dengue subieron en un ocho por ciento.
Nicaragua
continúa en el primer lugar como el país con más casos de dengue a nivel
centroamericano. Le sigue Honduras con al menos 67 mil casos y 101 muertes, la
tasa más alta de mortalidad de la región.
Hay que tomar en cuenta que el dengue, chinkunguya y zika tienen síntomas similares, pero pueden ser diferenciados.
Los síntomas del dengue son los
siguientes:
● Dolor de cabeza y fiebre
● Agrandamiento de ganglios
linfáticos
● Cansancio
● Náuseas o vómito
Hay que actuar rápido al notar
estos síntomas en la persona para evitar complicaciones o en el peor de los
casos, pérdidas.
Fuentes:
1. La Prensa